Sep 19, 2022 / 10:55

El mito del grito

Luis Antonio Pérez Fraga

* El rito del grito es un mito

Para empezar, el 15 de septiembre nunca pasó nada, el virrey pasó la noche en calma, fue el 16 de septiembre, que era domingo, cuando el cura Hidalgo (que era un cura golfo, mujeriego y trovador, tuvo dos hijas Vicenta y Micaela y al menos 8 nietos reconocidos que aún viven en Dolores) toca las campanas para llamar a misa de 7:00 de la mañana, y ya estando en el atrio, es cuando convoca a sus seguidores a tomar las armas, machetes o palos para iniciar la revuelta que duró 10 meses y nunca pasó más allá del pequeño triángulo que forman Querétaro, Guadalajara y las cercanías de la ciudad de México.

Hidalgo tenía aproximadamente 70,000 seguidores en total máximo, y ello obedecía a que encabezó las protestas por la terrible sequía que sufría el bajío. Así como ahora estuvieron Monterrey, Guanajuato y otros estados, de la misma manera, en ese año de 1810, Hidalgo encabezó un movimiento que encontró tierra fértil pues los campesinos se encontraban desesperados por esa terrible sequía y no por los gachupines, sino a favor de Fernando VII rey de España derrocado por Napoleón. Más bien la revuelta inició en contra de los franceses que invadieron España en 1808.

El 15 de septiembre se instituye en México como el día del grito porque Porfirio Díaz cumplía años ese día, y hacía tradicionalmente una fiesta en Palacio Nacional en donde invitaba a nobles, fifís, altos mandos del clero y del ejército y en la parte de abajo, hacía una verbena donde invitaba al “pueblo bueno” tacos, horchatas, aguas de sabores (y tocaban narcocorridos los Tigres del Bajío jajaja) y como no había luz, se le ocurrió tocar la campana que había mandado a traer de Dolores para celebrar el inicio de la independencia del día 16, para que el pueblo viera que él estaba en el balcón y lo aclamara. Hasta la fecha se desconoce si gritó algo o nada.

El abrazo de Acatempan es otro mito, ya que Guerrero no estuvo nunca ahí, en el desfile del Ejército Trigarante él va al final, es más, ni siquiera firma el acta de independencia ya que era analfabeta y no sabía leer ni escribir. Lucas Alamán dice que recuperó el informe de Iturbide y con otras fuentes, y confirmó que el insurgente -autorizado por Guerrero- que se reunió en Teloloapan con Iturbide fue José Figueroa.

La independencia de México no se puede explicar sin la intervención de Napoleón Bonaparte a España, cuando quita a Fernando VII y pone a su hermano José Bonaparte, conocido como “Pepe Botella” por su afición a las bebidas espirituosas, esto fue en mayo de 1808, lo que provocó que el cura Hidalgo en uno de los tres gritos que diera exclamara: “que muera el mal gobierno y viva Felipe VII”, refiriéndose al mal gobierno ¡pero de España! encabezado por Pepe Botella, hermano mayor de Napoleón.

Tres son los gritos que se le atribuyen a Hidalgo de acuerdo a tres diferentes historiadores:
"¡Viva nuestra madre santísima de Guadalupe!, ¡viva Fernando VII y muera el mal gobierno!" (obispo Manuel Abad y Queipo).
"¡Viva la América! (¡La América! ¿eh? no El América, que antier le ganó a las Chivas el clásico jajaja), ¡viva Fernando VII!, ¡viva la religión y mueran los gachupines!" (fray Diego Bringas).
"¡Viva la religión!, ¡viva nuestra madre santísima de Guadalupe!, ¡viva Fernando VII!, ¡viva la América y muera el mal gobierno!" (Lucas Alamán).

La independencia de México, incluso, se pudo haber consolidado cuatro meses después del levantamiento de 1810 por parte de Hidalgo, ya que hubo una batalla en donde Allende e Hidalgo vencen a los realistas (la del monte de las cruces) y el virrey ya estaba a punto de huir hacia España, pero fue cuando vino la ruptura entre Allende e Hidalgo, pues Hidalgo apresó a 300 españoles y los mató en la Alhóndiga de Granaditas lo que provocó la ruptura, ya que ellos se habían puesto de acuerdo en que Allende llevaría el movimiento armado e Hidalgo el movimiento social, y después de que vencieron a los realistas, Allende quiso tomar la Ciudad de México a lo que Hidalgo se opuso terminantemente y de ahí vino la ruptura total, pues Allende decía que las matanzas de no-combatientes y pillaje, que los sublevados de Hidalgo estaban haciendo en el bajío desprestigiaban al movimiento de independencia, incluso -cuenta Francisco Martín Moreno- que Allende trató de envenenar con cianuro ¡3 veces! al cura Hidalgo, pero que por ser un viejo muy zorro Hidalgo, Allende nunca lo logró.

Pero el cura Miguel Hidalgo y Costilla muere finalmente asesinado en Chihuahua un 30 de Julio de 1811, después de las derrotas insurgentes en Aculco y Guanajuato; primero fue atado de las piernas a una silla, sus ojos fueron vendados y él colocó su mano en el pecho. El pelotón abrió fuego: tres descargas se impactaron contra Miguel Hidalgo quitándole la vida. Su cadáver fue exhibido públicamente durante todo el día en Chihuahua, y al anochecer lo decapitaron.

Colgaron su cabeza para exhibirla en la alhóndiga de granaditas, junto con las de Allende, Aldama y Jiménez, pero antes las anduvieron exhibiendo, pues fueron transportadas a Zacatecas, a Lagos y a León, y hasta el 11 de octubre llegaron a Guanajuato y se colocaron dentro de unas jaulas de hierro que fueron colgadas, una en cada esquina de la alhóndiga.

La verdadera independencia de México se da hasta el 27 de septiembre de 1821 y el verdadero padre de la patria y orquestador de ella es: Matías de Monteagudo, un brillante cura español que llegó a la nueva España en 1783 pues era sobrino de un importante obispo y fue doctor en derecho estudiando en la Real y Pontificia Universidad de México donde llegó a ser el rector, fue párroco de La Santa Veracruz de 1799 a 1801, y según el excelente historiador Francisco Martín Moreno dice que De Monteagudo inventó a Iturbide -que forma el ejército Trigarante para pedir a España la independencia de México- y firman el acta de la antes Nueva España e instituyen la nueva república mexicana, esto, según Iturbide, para preservar los bienes del clero católico, ya que la constitución de Cádiz era anticlerical, y al ser apresado nuevamente Fernando VII en España en 1920 (y ahí lo obligaron a jurar ante la constitución de Cádiz), es que De Monteagudo inventa a Agustín de Iturbide quien se revela y pide la independencia y es cuando España finalmente la concede en un acuerdo, sin disparar un solo tiro, entre los insurgentes y el virrey Don Juan O´Donojú.

P.D.- Me parten el corazón estas historias…
Mi esposa y yo estamos ambos sin trabajo. Mi mamá murió en un accidente de tránsito. Tenemos 3 hijos y estamos todos viviendo en casa de mi abuela que falleció justo esta semana. Mi papá tiene que trabajar a sus 73 años.

  • William, Príncipe de Gales-. Jajajaja.

Las Co-mentadas en: lperezfraga@yahoo.com.mx

CD/YC

* Las opiniones y puntos de vista expresadas son responsabilidad exclusiva del autor y no necesariamente reflejan la línea editorial de Cambio Digital.

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