Feb 01, 2022 / 12:41

Encerrado y encadenado en su propia casa; así vive Javier Ramón, de 48 años

Isabel Zamudio

Las Choapas, Ver.- Javier Ramón de 48 años vive encerrado con cadena y candado en la casa que era de sus padres en Las Choapas; sufre supuestamente de esquizofrenia, el uso de solventes para drogarse le afectó el cerebro, al igual que su hermano Pablo Ramón, quien fue asesinado hace dos años y hallado muerto en el pozo de una vieja cantina.


Ambos se tornaban agresivos, llegando a lastimar a su madre; los papás de ambos tuvieron a salir de su casa ante el temor de morir en manos de sus hijos. La madre falleció y su padre ya está muy grande.


“Precisamente mi mamá se fue porque ya eran dos personas y entre los dos chocaban y eran muy agresivos y como nunca recibió apoyo del gobierno ni nada se tuvo que ir, hubo un tiempo que sí lo internamos en el centro de alcohólicos que la verdad no son instituciones para ellos pero llegaba el tiempo que en las mismas instituciones ya no los soportaban y los soltaban”, manifestó Samuel, el menor de los 9 hermanos, quien se hizo cargo de sus padres, y con apoyo de sus hijos y amigos, le pasa alimentos y bebidas a Javier, cuyo caso de viralizó, por las condiciones insalubres en que vive.

BUSCAN ATENCIÓN PSIQUIÁTRICA


El DIF de Las Choapas busca atención psiquiátrica, informó tras conocer el caso.


Samuel admite que es difícil hacerse cargo del enfermo mental, “Es un problema rebasa a cualquier persona, él a fuerza tengo que venir con dos o tres personas para cambiarlo, para bañarlo porque yo no puedo solo, él el agresivo la verdad…empieza a alterar y a gritar”.


Mientras chapean el terreno, Rafael, amigo de Samuel comenta que el enfermo se torna agresivo cuando intentan acercarse a él.


“Es agresivo, avienta las cosas y todo eso y da miedo, pero sí le traen comida de diario”.


Samuel asegura que lo mantienen bajo candado, porque otros indigentes y enfermos mentales llegaban a agredir a Javier y teme que corra la misma suerte que Pablo.


La historia de Javier y Pablo es más común de lo que pudiera pensarse pues en Veracruz de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud, del INEGI, el Instituto de Psiquiatría Ramón de la Fuente y la Encuesta Nacional de Adicciones habría más de 2 millones de habitantes en riesgo de enfrentar un problema mental o de comportamiento en el curso de su vida como depresión, ansiedad, estrés, trastornos bipolares, obsesiones compulsivas, Alzheimer, pánico, insomnio, alcoholismo, drogadicción o trastornos afectivos, entre otros padecimientos mentales o emocionales.

Pese a ello no existen instituciones públicas, de gobierno, para atender a pacientes psiquiátricos.

DE HOSPITAL MENTAL A CENTRO PARA ENFERMOS DE COVID

Lo que era el hospital mental de Orizaba fue convertido en centro para la atención de enfermos de coronavirus.

En Xalapa está el único centro de salud para pacientes con alguna psicopatología, que es el Instituto Veracruzano de Salud Mental “Dr. Rafael Velasco Fernández”, ubicado en el cerro de Macuiltepetl, pero rara vez ingresa pacientes para internamiento a largo plazo.

Recibir atención psiquiátrica en Veracruz es un lujo reservado sólo para personas de alto nivel económico, pues entre medicamentos, atención médica e internamiento se requieren mínimo 35 mil pesos al mes.

“He visto en la calle varias personas que están así enfermos mentales, donde quiera creo en todos los lugares hay pero en otros lugares hay clínicas psiquiátricas donde si los atienen y aquí solamente está Villa y Orizaba”, comentó una vecina de Las Choapas, quien tiene a dos familiares enfermos en casa.


El DIF Municipal de Las Choapas ha ofrecido apoyo para atender la salud de Javier “Supuestamente el DIF me va a ayudar para llevarlo a Orizaba pero en Villahermosa la verdad cobran una lana que la verdad está fuera de nuestros alcances, si te vienen cobrando como unos 10 mil ó 12 mil de medicamentos”.

DEAMBULAN ENFERMOS MENTALES, NO TODOS CUENTAN CON TECHO Y FAMILIA


En las calles de Las Choapas como en la mayoría de las ciudades de Veracruz, deambulan enfermos mentales; no todos cuentan con un techo y familia que se ocupe de ellos.

“Por eso hay muchas personas que están, aquí en Las Choapas hay muchas personas que los tiran, ahí andan en la calle, si usted se va al centro hay muchos locos que están allí, que están desamparados, que no tienen un techo, que no tienen una vivienda que no le da de comer nadie, ellos si sufren maltrato”

José, otro de los hermanos de Javier se comprometió a apoyar con la limpieza de la casa y la atención del mismo, negó que esté abandonado, aunque sí vive en condiciones insalubres, “Él no está abandonado y ahorita lo vamos a estar viendo cuando menos para que esté limpio y toda eso la cosa; lo vamos a ver qué esté limpio”.

CD/YC

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