El periodista Víctor Velarde, autor de la cabeza periodística más corta que se haya hecho en el mundo hasta hoy, recibió el 22 de julio de 1990 el homenaje de Excélsior, que publicó una entrevista con él titulada “Velarde, un millón de cabezas en Excélsior”.

Nacido en 1905, recordó sus inicios periodísticos en Revista de Revistas —mecanógrafo en 1920 y luego reportero tras haber pasado un tiempo en la sección de Cables Internacionales—. Contó cómo su excelente memoria le permitió reproducir una declaración hecha off the record por el secretario particular del presidente Lázaro Cárdenas, Luis I. Rodríguez, para tener luego que inventar un desmentido por instrucciones del director general de Excélsior, Rodrigo de Llano.

“Él inició el uso de siglas en los titulares periodísticos cuando cabeceó Concanaco para referirse a la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio; siguieron la Concamin y Canacintra”.

Respecto a la cabeza “¡Ya!” cuando la muerte del gobernante soviético José Stalin, Velarde lo recordó así:

Todos los periódicos en la mañana (5 de marzo de 1963) anunciaron: Stalin moribundo… Stalin gravísimo. Y yo pensé: ¿a mí qué me dejan para la segunda edición? [de Últimas Noticias de Excélsior]. Iba a preguntar a Cables: ¿Ya murió este señor?... ¿Sí, no?... Y todavía no.

Y me contestaban todavía no. Así que la cabeza de la segunda fue esa: Todavía no.

Y ya con el periódico en la calle, llegó el cable de que ya había muerto Stalin. Y entonces se siguió tirando una Extra de la Extra con la cabeza: ¡YA! a cinco columnas. Y como no había entonces tipos de ese tamaño, la mandé dibujar.

Esa cabeza le dio renombre periodístico internacional a Víctor Velarde.

CD/YC